12.9.05

frente al caos interno

A veces pasa que tenemos mil cosas en la cabeza y sentimos que no podemos con todo...
Tantas preocupaciones nos ofuzcan y empazamos a funcionar mal, a equivocarnos en las desiciones, o estar inseguros de poder con todo, y eso nos hace tambalear.
Nos debilitamos intelectual y físicamente.
Y quizas ocurre que hasta nos damos por vencidos en causas menores o descuidamos ciertos asuntos, simplemente por no sentirnos capacitados para hacer frente a tantas cosas.
Somos humanos, podemos fallar!
El año pasado leí en un libro una técnica (que si bien inconscientemente ya conocía), me sirvió para poder reorganizarme.
la técnica consiste en tres etapas:
1- bajar la ansiedad parando la pelota. es decir, frente al caos, nada peor que responder con más caos. porque la pelota se hace cada vez mas grande y despues no vemos salida.
Alejarnos del mundo si es necesario (al menos espiritualmente hablando) quedarnos en silencio, tomarnos un té y relajar la cabeza pensando en algún recuerdo o situación agradable.
2- desatar el caos. Tomar un cuaderno y anotar alli, todas esas cosas que nos tienen preocupados. Tanto laborales como afectivas, todo lo que va llegando a la cabeza, sin importar el órden, y sin cuidar demasiado lo que se escribe... la idea aca es que el inconsciente logre trabajar solo, sin ayuda intelectual.
3- organizar prioridades. releer lo escrito, pero esta vez pensando en un modo de resolverlo.
Anotando a un costado lo que podemos hacer por ese tema. Cuando sentimos que ya lo desmarañamos en nuestra cabeza, entonces los enumeramos, para darle su prioridad.

Yo se que parece un ejercicio muy bobo, pero les puedo garantizar que no siempre nos tomamos esa media hora que se necesita (quizas mas o quizas menos) para darle lugar a las preocupaciones y de ese modo, lograr que la ansiedad desaparezca.
A veces estos mismas etapas las hacemos mentalmente, pero ponerlas por escrito, nos ayuda a revisarlas mejor, y facilita la posterior solucion.
Hace bien darse cuenta que hay cosas que si pueden quedar para mañana, y cosas que aunque estemos convencidos, no dependen de nosotros.
Al cerrar el cuaderno, seguramente nos sentiremos mas livianos.

2.9.05

Contra el mal humor

Cuando era chica, pasaba mucho tiempo con una especie de "tia postiza" (Nanine). Estar con ella era divertido, ya que hacía "locuras" que en mi casa nadie hacía.
Recuerdo ir en su auto con la música a todo volumen cantando compenetradamente canciones de Sandra Mihanocich, y el mejor momento era cuando por fin llegabamos a su casa y ella corría las sillas del comedor, ponía la canción "Gloria de Laura Branigan" (aquel hit de los 80's) y enajenada nos obligaba a imitar sus coreagrafías y armar trencitos tipo carnaval carioca. Por supuesto habia varios "bises" antes de dar por terminado el ritual.
Evocando aquellas buenos momentos, lo traslado a mi actualidad para combatir el mal humor.
Ritual "Nanine" de la alegría (recomiendo su uso en momentos extremos, por ejemplo cuando ya no nos aguantamos a nosotros mismos!).
Analizar la situación y tratar de reconocer el conflicto puntaul de "ese" momento.
Si lo que nos tiene así no es algo que pueda revertirse en ese momento, aún podemos hacer un esfuerzo para cambiar nuestra actitud.
Pensamos en una música que nos de energía, que nos impulse a bailar, que nos traiga buenas sensaciones.
(En mi caso suelo poner alguna zamba brasilera)
Dejamos que el cuerpo se relaje y se conecte con el ritmo. Si estamos acompañados, tenemos la opción de hacerle un espactáculo a nuestro acompañante (cantando y bailando) o bien invitarlo a bailar.
Si estamos solos, es el momento ideal, para dar el mejor show musical de nuestra historia, con la música a todo volumen y ridiculizandonos al extremos de arrancarnos una sonrisa o carcajada frente a algún espejo.
El conflicto no desaparecerá, pero al menos nosotros estaremos mucho mejor prediscpuestos y habremos pasado un excelente momento!